Siguiendo el ejemplo del Senador terrateniente que es su padre, Jorge Carlos Ramírez Granados “Croata”, hijo de Jorge Carlos Ramírez Marín, Senador por Yucatán por el PRI, sigue los pasos de su papá, y se da una vida de multimillonario al más puro estilo de los magnates. Aquí sí con todas las dudas de procedencia de esos recursos, porque de trabajo, quien sabe.
Y es que el Senador lo dijo una vez cuando su vástago compitió en la facultad de Derecho por la dirigencia estudiantil, que era capaz de comprarle todo. Y lo está cumpliendo. Resulta que el junior tiene ahora un departamento de lujo. Ni más ni menos que un penthouse en el norte de la ciudad en un proyecto denominado Enzo, el cual tiene un valor de 13 millones de pesos.
El hijo mayor de AMLO, con su residencia en Houston. Estados Unidos se quedó corto al lado de este magnate junior yucateco.
El caso es que tanto se las da de rey él croatita que, para darse el alucine, se trajo a su novia de Estado de México para que viva con él en ese departamento, que además mandó decorar, con otra fuerte suma de 9 millones de pesos; lo que gana cualquier mortal en un mes de Chamba.
Solo ahí ya tiene 22 millones de pesos derrochados en el princeso que no se imagina los lujos que se podrá a dar si papi se convierte en candidato a gobernador. Ya controlan una buena parte de la entidad con tierras compradas, y otras tomadas mientras estuvo en Sedatu, pero no hay empacho, y al princeso de papá, todo lo que pida el nené.
¿De dónde sale el recurso para darse estos lujos?, en la lista están el Senado, las múltiples empresas del Senador, de toda la tierra que tiene comprada, en fin, sin duda auténtica cepa priísta.